Me encanta el pollo. Y al contrario que a muchísima gente, la parte que más me gusta es la pechuga, aún siendo más seca y más "sosa". Las patatas asadas también me chiflan y a la zanahoria le tengo una "obsesión" últimamente que se la echo a casi todo. Así que junté tres de mis ingredientes favoritos, los metí en el horno y a disfrutarlos.
Un plato sencillo y económico, con el que aprovecho para presentarme al concurso de las chicas de "La cocina de Camilni", recetas dulces y saladas, por haber sido su blog uno de los recomendados por Pyrex. Animaros a participar, todavía quedan unos días.
INGREDIENTES:
- dos pechugas de pollo
- 3 zanahorias
- 4 patatas
- aceite
- un chorro de vino blanco
- sal
- orégano
PREPARACIÓN:
Empezamos salando las pechugas, rebozándolas en orégano e impregnándolas en aceite y vino blanco. Las dejamos un par de horitas.
Pelamos las patatas y las cortamos en trozos. Pelamos las zanahorias y las cortamos en rodajitas. Salamos y mezclamos en una fuente con un poquito de aceite.
Con el horno precalentado a 200º, horneamos las patatas y zanahorias unos 15 minutos. Mientras doramos las pechugas en una sartén. Las incorporamos a la fuente del horno y asamos hasta que estén hechas.
Servimos las pechugas en rodajas con las patatas y las zanahorias.
Un plato sencillo, sano y económico. Buen provecho!!