Hoy os traigo una tarta que hice hace ya cosa de un mes, pero no tuve ocasión de publicarla antes. Masa quebrada con chocolate y careixós, buenísima.
Seguramente muchos de vosotros no sabréis que son los careixós, especialmente si no sois de mi tierra. Los careixós son como fresitas silvestres tipicamente gallegas, son minúsculos y no se encuentran fácilmente. Suelen estar escondidos por los caminos y hay que pararse a buscarlos.
Yo los tengo a lado de la puerta de casa, exactamente debajo de la ventana de la cocina. Es que vivo rodeada de naturaleza por todos lados y también estoy un poco escondida, jeje. Según mi chico que cuando hicieron la casa (no es nuestra, estamos alquilados) estaban ahí y luego volvieron nacer. Y el pobre el año pasado no se dio cuenta y los segó toditos!
La pena es que no llegaron a mucho, había poquitos y ya son pequeños ellos. Apenas pude dejar una ridiculez para decorar la tarta.
Los careixós le dan un toque ácido al chocolate, delicioso, no se aprecian a la vista, pero están. Uno de mis cuñados quedó encantado con ella. Es que cada vez que venía y veía los careixós le caía la baba, y como también es chocolatero...
Con esta receta participo en el concurso propuesto por el blog "Atrapada en mi cocina" y patrocinado por "Ibili": "TU MEJOR TARTA". Lidia, una cocinera 10 a la que estoy segura que todos conocéis está celebrando sus 3 años de blog con este concurso. Tenéis hasta mañana para participar.
INGREDIENTES:
Masa quebrada:
- 175 gr. de harina
- una pizca de sal
- 75 gr. de mantequilla fría en dados
- 75 gr. de azúcar
- 2 yemas de huevo
- huevo batido para pintar la masa
Relleno:
- 175 gr. de chocolate negro
- 2 cucharadas de azúcar
- 380 ml. de nata para montar
- 2 huevos batidos
- careixós al gusto o los que haya, jeje, en mi caso era como un puñado, un poco escaso pero suficientes
Decoración:
- cacao en polvo
- tres ridículos careixós
PREPARACIÓN:
Preparamos primero la masa quebrada. Ponemos la harina y la sal en un cuenco. Añadimos la mantequilla y vamos mezclando, con las yemas de los dedos, hasta que esté como pan rallado. Añadimos el azúcar y las yemas y hacemos una bola. (Si es necesario echaremos una cucharada de agua para terminar de ligar la masa) La metemos unos minutos en el frigo para que enfríe o en mi caso la hice la noche anterior. Aplanamos la masa y la volvemos a enfriar otros 15 minutos. La estiramos en el molde y de nuevo la volvemos a enfriar.
Precalentamos el horno a 180º. Cubrimos la masa con papel de horno y garbanzos, para que no suba y horneamos unos 15 minutos. Quitamos el papel de horno y los garbanzos y pintamos con huevo batido. La horneamos 5 minutos más.
Para el relleno calentamos la nata sin que llegue a hervir y añadimos el chocolate y el azúcar. Batimos hasta que esté bien derretido y mezclado. Batimos los huevos y los incorporamos despacio a la mezcla anterior, sin dejar de batir. Añadimos los careixós a la mezcla y la vertemos sobre la masa.
Con el horno precalentado a 160º horneamos unos 20 minutos, hasta que el relleno esté firme.
Decoramos con cacao en polvo espolvoreado y algunos careixós. Sencilla y deliciosa.
Buen fin de semana!