También me apetecía mucho hacer una casita de galletas y cuando la estaba "creando" me enteré del concurso, así que aprovecho para presentarla.
Este es el segundo año que lo celebra. Animaros a participar, es tan sencillo como hacer unas galletas de temática navideña. Además cuenta con un jurado de lujo: Alma, de "Objetivo cupcake perfecto" y Míriam y Estíbaliz, de "Mensaje en una galleta". El plazo acaba el 30 de diciembre. así que aún os queda tiempo.
La masa de las galletas es la que uso siempre. El muñeco de nieve es de fondant, encima de una galleta. El árbol es de galletas con fondant. Los niños también con fondant. Más galletitas alrededor de la casa, con glasa. Las escaleras y lo que asoma de Papá Noel es fondant, al igual que el caminito. La nieve es glasa blanca. Para la casita no tenía molde, así que hice una plantilla con cartulina para darle forma. La cubrí con fondant y con glasa las uní. Mientras la montaba, me imaginaba una pequeña historia.
En algún lugar del mundo, dos preciosos niños duermen esperando la llegada de Papá Noel. Están muy nerviosos y preocupados y les ha costado coger el sueño. Estos últimos días fueron un poco traviesos y su mamá siempre les dice que se tienen que portar bien, que el señor de la barba blanca los está viendo y no les dejará sus regalos.
Papá Noel está un poco lento este año. Se ha pasado doce meses comiendo dulces a todas horas y ahora los kilos de más no lo perdonan. Hace horas que tendría que haber terminado, está amaneciendo y los niños siempre madrugan ansiosos para recibir sus regalos.
Va tan apurado que tropieza y se cae del tejado. ¡Qué patoso! Como no se de prisa, lo pillaran con las manos en la masa, o quizás debería decir con el culo en la chimenea.
Los dos hermanos, ya medio despiertos, sienten un ruído fuera de casa. El niño, más atrevido que su hermana gemela, la anima para ir a investigar. A lo mejor Papá Noel se equivocó y en vez de dejar los regalitos junto al árbol de navidad del salón, los dejó en el que tienen en el jardín.
Sus papás todavía duermen y silenciosos se dirigen a la puerta. Llevan puestos los pijamitas a juego con las zapatillas que les trajeron los Reyes Magos el año pasado. Son gorditos, pero no para estar al frío del nevado invierno. ¡Cómo su mamá despierte y los vea, les caerá una buena!
Desde la puerta, miran hacia el árbol del jardín. ¡No hay nada! El señor de la barba no ha dejado regalitos este año. Se miran y están a punto de llorar cuando se oye otro ruído que viene del tejado.
¡Quién le mandaría a él zamparse tanto chocolate! ¡Ahora está atascado en la chimenea y los pequeños están a punto de descubrirlo! Su barriga ha aumentado de tamaño o cambiarían la chimenea. (Una vocecita interior le dice que no le eche la culpa a la chimenea)
El niño se está acercando a las escaleras del lateral de la casa cuando sus papás los llaman. Rápidamente se meten dentro y corren a su encuentro llorando, diciendo que Papá Noel no ha venido.
"Y los regalos que hay en el salón, ¿para quién son?", les dicen sus papás consolándolos.
Claro, ellos corrieron a mirar en el árbol del jardín, pero no miraran dentro primero. ¡Y allí estaban!
Fuera, el señor de la barba blanca sonríe satisfecho. Con esfuerzo, pero ha llegado a tiempo. Eso sí, durante los próximos meses nada de dulce... ¡o tendrá que retirarse!
Espero que os guste!!! Feliz domingo.
Este es el segundo año que lo celebra. Animaros a participar, es tan sencillo como hacer unas galletas de temática navideña. Además cuenta con un jurado de lujo: Alma, de "Objetivo cupcake perfecto" y Míriam y Estíbaliz, de "Mensaje en una galleta". El plazo acaba el 30 de diciembre. así que aún os queda tiempo.
La masa de las galletas es la que uso siempre. El muñeco de nieve es de fondant, encima de una galleta. El árbol es de galletas con fondant. Los niños también con fondant. Más galletitas alrededor de la casa, con glasa. Las escaleras y lo que asoma de Papá Noel es fondant, al igual que el caminito. La nieve es glasa blanca. Para la casita no tenía molde, así que hice una plantilla con cartulina para darle forma. La cubrí con fondant y con glasa las uní. Mientras la montaba, me imaginaba una pequeña historia.
En algún lugar del mundo, dos preciosos niños duermen esperando la llegada de Papá Noel. Están muy nerviosos y preocupados y les ha costado coger el sueño. Estos últimos días fueron un poco traviesos y su mamá siempre les dice que se tienen que portar bien, que el señor de la barba blanca los está viendo y no les dejará sus regalos.
Papá Noel está un poco lento este año. Se ha pasado doce meses comiendo dulces a todas horas y ahora los kilos de más no lo perdonan. Hace horas que tendría que haber terminado, está amaneciendo y los niños siempre madrugan ansiosos para recibir sus regalos.
Va tan apurado que tropieza y se cae del tejado. ¡Qué patoso! Como no se de prisa, lo pillaran con las manos en la masa, o quizás debería decir con el culo en la chimenea.
Los dos hermanos, ya medio despiertos, sienten un ruído fuera de casa. El niño, más atrevido que su hermana gemela, la anima para ir a investigar. A lo mejor Papá Noel se equivocó y en vez de dejar los regalitos junto al árbol de navidad del salón, los dejó en el que tienen en el jardín.
Sus papás todavía duermen y silenciosos se dirigen a la puerta. Llevan puestos los pijamitas a juego con las zapatillas que les trajeron los Reyes Magos el año pasado. Son gorditos, pero no para estar al frío del nevado invierno. ¡Cómo su mamá despierte y los vea, les caerá una buena!
Desde la puerta, miran hacia el árbol del jardín. ¡No hay nada! El señor de la barba no ha dejado regalitos este año. Se miran y están a punto de llorar cuando se oye otro ruído que viene del tejado.
¡Quién le mandaría a él zamparse tanto chocolate! ¡Ahora está atascado en la chimenea y los pequeños están a punto de descubrirlo! Su barriga ha aumentado de tamaño o cambiarían la chimenea. (Una vocecita interior le dice que no le eche la culpa a la chimenea)
El niño se está acercando a las escaleras del lateral de la casa cuando sus papás los llaman. Rápidamente se meten dentro y corren a su encuentro llorando, diciendo que Papá Noel no ha venido.
"Y los regalos que hay en el salón, ¿para quién son?", les dicen sus papás consolándolos.
Claro, ellos corrieron a mirar en el árbol del jardín, pero no miraran dentro primero. ¡Y allí estaban!
Fuera, el señor de la barba blanca sonríe satisfecho. Con esfuerzo, pero ha llegado a tiempo. Eso sí, durante los próximos meses nada de dulce... ¡o tendrá que retirarse!
Espero que os guste!!! Feliz domingo.
Evelyn que preciosidad......se ve genial, suerte en el concurso preciosa. Besitossss.
ResponderEliminarEvelyn y la historia preciosa Besossss.
ResponderEliminarPero me nuda currada!!! es preciosa, mucha suerte en el concurso.
ResponderEliminarBesine
Una historia muy bonita y muy real, que no solo le pasa a Pape Noel, jajajaja, al resto de los mortales también nos pasa, jajaja (lo de coger kg) me refiero jajajaja.
ResponderEliminarLa casita una pasada, te deseo mucha suerte
Besos
Si la casita me ha parecido una auténtica preciosidad, la historia me ha gustado mucho chiquilla.
ResponderEliminarEspero que tengas mucha suerte en el concurso
BEsitos
Qué preciosidad de casita, Evelyn! Digna de ganar sin duda. Suerte y un beso!
ResponderEliminarUna entrada de lujo! Genial las galletas y muy bonita la historia! Suerte en el concurso!
ResponderEliminarHOLA EVELYN, QUÉ DIVINA TE HA QUEDADO LA CASITA, SUERTE Y FELICITACIONES. BESITOS
ResponderEliminarEvelyn , una casita preciosa ! Y la historia me ha encantado. Mucha suerte en el concurso! Un besito,guapa .
ResponderEliminarYo le he prometido a Laura una y tengo que ponerme ya!!
ResponderEliminarA ver si me sale tan bonita, un abrazo
La casita es chulisima Evy y la historia una preciosidad,me ha gustao mucho :)
ResponderEliminarUna casita preciosa igual que la historia que cuentas.
ResponderEliminarBesos.
Una casita preciosa!!!! Y menuda historia tan bonita! Mires por donde mires, arte por todos los costados! Biquiños y suerte con tu participación!
ResponderEliminarQué bonito!! Espero que ganes, porque me encanta.
ResponderEliminarPues que preciosidad de casa, la verdad que es merecedora de un buen premio, me ha encantado. Mil besicos amiga
ResponderEliminarJolin, que apañada eres, se ve lindisima¡ besiños
ResponderEliminarHolaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa me ha encantado ¡que tengas suerte! y el cuento muy pero muy gracioso aunque lo va a tener bien dificil con lo goloso que es el muchacho jajajaj. Saludos y feliz semana.
ResponderEliminar¡Qué linda!
ResponderEliminar;)
Una historia maravillosa y la casita con los muñequitos te ha quedado preciosa, te la has currado bien. Que tengas mucha suerte en el concurso!!
ResponderEliminarBesitos.
Bueno, bueno cada dia me sorprendes mas.
ResponderEliminarUna casita preciosa al igual que la historia.
Te deseo mucha suerte Evy, te la mereces primor.
Besinos.
Ayyy Evelyn ,,disculpa que no te haya visitado con la asiduidad que yo quisera, estoy un poco perjudicada de salud,,pero bueno con el tiempo se arreglara.
ResponderEliminarPedazo de casa navideñaaaa, que pasadaaaa, me encanta y que sepas que sigues teniendo mi admiración como siempre.
Biquiños millll
Jolines, que currada!!!! te ha quedado genial!!!
ResponderEliminarMucha suerte en el concurso aunque yo creo que no te hace falta, la galleta es fabulosa y bien bonita.
ResponderEliminarBesos.
Me parece una maravilla, es una manualidad en toda regla.
ResponderEliminarBesicos
Preciosa la casa y preciosa la historia, suerte........un bico
ResponderEliminarQué dulce cuento! y cuántas bonitas dulzuras has hecho. Seguro que te has divertido muchísimo haciéndolas.
ResponderEliminarBesosss
me gustan las dos cosas ,el cuento y la casita,te ha quedado una casa muy divertida ..con papa noel incluido,muy lindo todo
ResponderEliminarbesitos